Hecatombe.

Que nadie se asuste, el título no tiene nada de relevante. Recordemos en este momento que Hecatombe significa en griego antiguo: sacrificio religioso de 100 bueyes. Posteriormente evolucionó hacia cualquier sacrificio religioso independientemente de la cantidad de animales sacrificados.

Después de esta aclaración pedante, procederé a explicar que el título procede de la celebración de la entrada 100 de este espacio. Esas cien entradas si que han sido un autentico sacrificio para aquellos de vosotros que las hayais leído. Yo estoy inmunizado, al fin y al cabo soy el autor de los disparates y eso quieran que no... inmuniza.

A lo largo de estas 100 entradas he hablado de todo aquello que se me ha ocurrido y de algunas otras cosas también. No tiene ninguna pretensión, simplemente es por el mero placer de escribir sobre aquellas cuestiones que de una forma u otra han acontecido en este tiempo.

Este espacio tiene el trasfondo de un retrato costumbrista, la realidad cotidiana convertida en disparate literario. Si le ha gustado a alguien, si algo ha hecho gracia, si ha hecho reflexionar... tendrán que disculparme ya que no era esa mi intención todo ello procede de las mentes calenturientas de aquellos de vosotros que lo leeis... haced que os lo mire un especialista porque leer esto no puede ser ni normal ni sano.

Así que mañana más (o con suerte para vosotros, no).

Tampoco os daré las gracias porque no os las mereceis, nunca os han dicho que cuando alguien hace algo que no está bien no hay que reirle la gracia... pues tomad nota.