El Cuadro

Siempre he tenido facilidad para interesarme por cosas de lo más variopinto; lo último a lo que he llegado es al cultivo de plantas aromáticas; he plantado albahaca (que está brotando la mar de lustrosa) y ahora me dedicaré a la hierbabuena; según vaya encontrando semillas y que sea época de siembra ire ampliando el repertorio (mis siguientes objetivos pueden ser el tomillo y el romero).

Junto un montón de cosas pero no colecciono ninguna (porque eso implicaría un orden y un cuidado que no van conmigo). Tengo junto al teclado del ordenador desde el que escribo en torno a veinte piedras (cuarzos la mayoría) procedentes de diferentes playas y lugares extraños; también tengo conchas, un monton de monedas, entradas de conciertos, de museos, alguna postal, libros por todas partes y todo ello en el más absoluto de los desórdenes (que es lo que corresponde y como realmente se disfrutan este tipo de cosas).

Tengo discos duros para almacenar las miles de fotos que he hecho (una gran inversión la cámara, no cabe duda de que se ha amortizado con creces) y que normalmente no descargo ni reviso hasta que ya no caben más. Si alguún día tengo algun dinero sobrante lo dedicaré a comprarme otra cámara.

Supongo que todos estos objetos tienen como finalidad rellenar aquellos vacíos que de otra forma se harían mucho más latentes (si cabe).

Y además de todo eso... gimnasio, rugby, pequeños viajes, trabajo, música, insomnio.