Balonmano

Para aquellos que no lo sepan (y para los que lo saben también) les diré que se está celebrando el campeonato del mundo de balonmano y que hoy se ha disputado el encuetro España-Francia.

El encuentro ha finalizado en empate (como los dos anteriores entre ambas selecciones) y ha sido un empate de esos de que dejan un sabor de boca un poco extraño.

Es extraño porque aunque España ha empatado con el mejor equipo del mundo actualmente (campeón del mundo, olímpico y de Europa). Lo ha hecho despues de haber sido dominada durante todo el partido por la apisonadora francesa. Y ha sido al final del partido cuando ha conseguido dar el arreón que le ha llevado a empatar el partido (si bien pudo ganarlo a 30 segundos del final con un contragolpe de Chema Rodríguez que se estrelló en el poste de la portería defendida por Omeyer y pudo perder el partido en un último lanzamiento de Luc Abalo que detuvo brillantemente Arpad Sterbik).

Ese arranque "épico, heróico" de furia española ha sido ejemplo del potencial del grupo de Valero Rivera pero también se sabe que no funcionará en todos los partidos,sobre todo ahora que se celebran los encuentros decisivos.

España debe seguir creciendo como conjunto aunque se note mucha dependencia de lo que pueda hacer Alberto Entrerríos; es necesario asumir que a muchos de los jugadores españoles más destacados se les está agotando el fuelle: Juanín, Iker Romero, el propio Entrerríos y que las nuevas hornadas de jugadores tienen que ir tomando poco a poco el relevo.

Mientras tanto disfrutamos de este empate ante la mejor selección del mundo y ante uno de los jugadores más destacados de la historia del balonmano: Nikola Karabatic.