El Pazo de Meirás

Impacientes, que son unos impacientes, ese es el resumen que se podría sacar de la apertura al público del Pazo de Meirás.

Solamente han pasado 34 años y medio de la muerte del General Franco ¿a que vienen tantas prisas? ¿y la memoria histórica?...

Por fin los herederos del caudillo han aceptado a regañadientes abrir las puertas del Pazo de Meirás al público... Surgen muchas preguntas al respecto ¿porque motivo siguen disfrutando de esta propiedad los herederos de Franco? Quizás sea para recordarnos la impunidad con la que siguen disfrutando de una herencia que tan legitimamente obtuvo su abuelo.

No deja de ser irónico que cuando se habla de los dictadores africanos y de todo lo que se han enriquecido durante sus mandatos, olvidemos aquellos ejemplos que tenemos más próximos (al alcance de la mano) y que estaría muy bien que se supiese el contenido exacto de la herencia que legó Franco a sus descendientes. Y se pudiese poner fin de una vez a este esperpento cada vez que se citan algunos lugares y situaciones.

Sirve también para que aquellos a los que se les niega la posibilidad de saber donde están los restos de sus familiares, puedan saber donde descansan los familiares del caudillo cuando les viene en gana. Y sobre todo, saber que como muchas otras cosas sangrantes... es con dinero de nuestros bolsillos (en estas épocas en las que tanto abunda).